Una invitación a crear un proyecto ¡Ya!

La decisión más difícil es la decisión de actuar; lo demás sólo es cuestión de tenacidad.

Amelia Earhart,
Primera mujer en cruzar sola el Océano Atlántico

Es probable que si estás leyendo esto, alguna vez hayas sentido el impulso de crear algo o de iniciar algún proyecto. Con suerte ya hayas realizado varias cosas hasta el momento y quizá muchas de las ideas de las que alguna vez has tenido ahora son una realidad. Aunque lo más probable es que ese no sea el caso. 

Pareciera que aunque tengamos motivaciones claras y hasta planes sobre cómo llevar a cabo nuestras ideas, nunca estuviéramos listos para dar el primer paso, es como si siempre hubiera algo que nos detiene para poner manos a la obra. Ese algo realmente es un alguien y somos nosotros mismos. Como creadores, la primera persona a la que tenemos que convencer de que vale la pena hacer cualquier cosa, es a nosotros mismos, desafortunadamente somos muy difíciles de convencer, ya que nuestro cerebro está acostumbrado a buscar la comodidad y la seguridad.

Crear algo requiere que salgamos de nuestra zona de confort y nuestro cerebro busca mil y un razones para convencernos de que estamos mejor así como estamos; después de todo, si nos atreviéramos a crear algo, podrían salir mal muchas cosas y quedaríamos en ridículo. Estas y otras ideas limitantes pueden pasarnos por la cabeza. Entonces, ¿Cómo es que podemos iniciar cualquier cosa? ¿Acaso estamos condenados a sufrir esta lucha interna cada que queramos llevar a cabo nuestras ideas?

Expertos en el área de la psicología creen que esto tiene que ver con nuestras creencias, nuestro entorno y la percepción que tengamos de nosotros mismos; estas (entre otras cosas) hacen más fácil o complicado que desarrollemos una personalidad emprendedora, audaz y consciente de que somos capaces de enfrentarnos a retos distintos de forma constante.

¿Cómo desarrollamos éste marco mental? ¿Cómo desarrollamos estas habilidades? La respuesta, por sencilla que parezca, es a través de la experiencia; es decir, simplemente haciendo cosas. Como verás nosotros no empezamos con algo enorme fuimos haciendo pequeñas acciones que se han ido sumando a lo largo de los años. Tu puedes seguir ese mismo camino o uno similar.

La mejor recomendación que podemos hacerte querido creador o creadora, es que intentes todo aquello que desees hacer, recuerda que siempre tendrás la oportunidad de mejorar si es que las cosas no salen como lo esperabas. Verás que con el tiempo adquirirás nuevas habilidades y sentirás más confianza en ti mismo.

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