El desarrollo del lenguaje es un proceso que inicia desde el momento en que nacemos, perdurando hasta la pubertad, el lenguaje por sí mismo es un proceso cognitivo a través del cual se genera un proceso comunicativo.
Para que ocurra este proceso de desarrollo, se consideran varios factores fundamentales:
- La integridad de los órganos implicados (como el aparato fonador, el sistema auditivo, etc.).
- El adecuado funcionamiento y la maduración del sistema nervioso.
- Una capacidad intelectual mínima, dado que se sabe que algunas personas con discapacidad intelectual profunda no logran adquirir el uso normal del lenguaje.
- Habilidades sociales cognitivas básicas, como la intencionalidad o motivación para comunicarse con los demás (esto puede estar ausente en niños con autismo), entre otros.
- Interacción con hablantes competentes; la participación de adultos es crucial, ya que la evidencia muestra que los “niños salvajes”, que no tienen contacto con adultos o personas con habilidades lingüísticas, no desarrollan el lenguaje por sí mismos, incluso si tienen una inteligencia normal.
Desde muy temprano, los niños muestran motivación y esfuerzos comunicativos, lo que se conoce como protoconversación. Estos son diálogos muy simples, marcados por el contacto visual, sonrisas, balbuceos y turnos en la expresión. Este tipo de comportamiento se puede observar en niños de apenas dos meses.
Teorías que explican el desarrollo del lenguaje
La explicación de las características del desarrollo del lenguaje se divide en tres dimensiones fundamentales:
- La forma, que implica el progreso cronológico en la adquisición de sonidos, la expansión del vocabulario y la complejidad gramatical a medida que el niño desarrolla sus habilidades lingüísticas
- El contenido, que analiza el significado, las restricciones y la intención detrás de las expresiones del niño
- El uso, que se centra en la adecuación pragmática y la pertinencia de las expresiones en diferentes contextos
Es importante tener en cuenta que estas adquisiciones ocurren simultáneamente en los tres niveles y que el proceso es inherentemente arbitrario.
Dimensión formal
- Balbuceo inicial y desarrollo vocal: En la etapa inicial, los niños balbucean, base del habla debatida
- Desarrollo fonológico y primeras palabras: Entre los 12 y 18 meses, surge desarrollo fonológico, con fonemas iniciales y primeras palabras, típicamente monosílabos reduplicados y onomatopeyas
- Etapa holofrástica: Las primeras palabras, en el período holofrástico, expresan significados amplios, caracterizando un periodo de desarrollo lingüístico temprano
- Desarrollo gramatical y ampliación del vocabulario: A partir de los 18 meses, el lenguaje progresa a frases telegráficas de dos elementos, mientras se adquieren nuevos sonidos y se expande el vocabulario, con una aceleración notable en su adquisición
- Desarrollo sintáctico y gramatical posterior: Durante el desarrollo, se adquieren nuevos sonidos y se avanza en la gramática, construyendo frases complejas con pronombres, adverbios, preposiciones, artículos, y utilizando interrogativas y negativas
- Errores y regularización: Se analiza la regularización o sobrerregularización en niños, donde aplican reglas gramaticales inflexiblemente, potencialmente resultando en errores gramaticales
- Desarrollo del lenguaje en edades posteriores: Se citan hitos en el desarrollo fonológico y gramatical en etapas posteriores, como la incorporación de nuevos sonidos, subordinadas causales y consecutivas, y una sintaxis más compleja
- Continuidad del proceso de adquisición del lenguaje: Aunque los niños dominan las estructuras gramaticales principales en etapas tempranas, el proceso de aprendizaje del lenguaje persiste durante la primaria y secundaria, ya que deben adaptarse a diversos contextos comunicativos
Dimensión léxica
- Adquisición inicial del léxico infantil
- Tipos de sustantivos en el primer lenguaje
- Sobreextensiones y subextensiones en el uso del lenguaje
- Explicaciones de las sobreextensiones: parecido perceptivo VS funcional
- Relaciones semánticas en oraciones de dos palabras
- Estrategias cognitivas de adquisición del lenguaje, según Slobin, (1895)
- Principios operacionales para la construcción del lenguaje
Adquisición del lenguaje
La adquisición del lenguaje, un área de la lingüística, examina cómo los niños aprenden a hablar durante la infancia, un tema debatido entre lingüistas y psicólogos infantiles. Noam Chomsky defiende teorías innatistas que sugieren que los niños tienen una capacidad innata para el lenguaje, desafiando la idea previa de que solo era un fenómeno cultural de imitación. Otras perspectivas, como las de Jerome Brunner y Jean Piaget, enfatizan diferentes aspectos del lenguaje. La psicolingüística estudia los mecanismos de adquisición mediante experimentación y análisis de diálogos entre adultos y niños.
Una revisión de 64 estudios entre 1986 y 2016 encontró que en la etapa preescolar, las habilidades relacionadas con el código (por ejemplo, conocimiento de letras) se vinculan indirectamente con la comprensión lectora a través de la decodificación. La comprensión lingüística también está directamente relacionada con la comprensión lectora, siendo más crucial en lectores mayores. Estos hallazgos sugieren que la instrucción efectiva de la comprensión lectora requiere abordar una variedad de habilidades lingüísticas.
Competencia comunicativa
Según Michael Halliday, el desarrollo de la capacidad pragmática del lenguaje atraviesa tres etapas.
En la primera fase, se identifican seis funciones:
- Uso instrumental: adquirir objetos para satisfacer necesidades
- Función reguladora: solicitar que alguien haga algo
- Función interaccional: utilizar el lenguaje en interacciones sociales
- Función personal: expresar emociones y pensamientos
- Función heurística: explorar y aprender mediante el lenguaje
- Función imaginativa: crear contextos ficticios con el lenguaje
En la segunda fase, que es una fase de transición, aparecen las siguientes funciones:
- Pragmática: el lenguaje como acción, derivada de las funciones instrumental y reguladora
- Matética: el lenguaje como herramienta de aprendizaje, derivada de las funciones personal y heurística
- Función ideacional, que contribuye a ambas
La tercera fase marca el inicio del sistema adulto del lenguaje, destacando tres funciones:
- Función ideacional
- Función interpersonal
- Función textual
Según Jean Piaget, entre los dos y los cinco años, el lenguaje de los niños se caracteriza por monólogos, seguidos por monólogos colectivos (nivel I). De los cinco a los siete años, surgen asociaciones entre el interlocutor y el pensamiento y la acción, así como la pelea y la colaboración en acciones o pensamientos no abstractos (nivel 2B de primer tipo). También se observa la discusión primitiva (nivel 2B de segundo tipo) y la colaboración en pensamientos abstractos (nivel 3A). A partir de los siete años, se presenta la discusión verdadera (nivel 3B).