Existen características similares entre la pedagogía y la andragogía, principalmente que ambas tienen la finalidad de educar al ser humano por medio de problemas y tareas. Esto no significa que el enfoque sea el mismo porque la primera se enfoca a un público infantil, mientras que el otro campo de estudio va dirigido a un público adulto.
En este artículo te explicaremos las principales características, propósitos y ejemplos estratégicos aplicables en ambos casos para lograr un aprendizaje en la comunidad educativa.
De la pedagogía a la andragogía: características
La principal diferencia que puede mencionarse si nos basamos en el esquema de Sandoya (2008), es que en la pedagogía se busca lo racional, mientras que en la andragogía se espera un concepto personal. A pesar de que ambas son empíricas, para lograr ese conocimiento se opta por hacer uso de diversas estrategias diseñadas de acuerdo a las características de los alumnos.
Como propósitos, la pedagogía tiene el propósito de aplicar modelos de enseñanza para resolver problemas de aprendizaje. Por otra parte, la andragogía tiene como fin lograr un aprendizaje autónomo y llevar a cabo una autoeducación.
Ejemplo aplicado en la pedagogía
Se aplican estrategias de aprendizaje como dejar que los alumnos desarrollen su propio criterio sin tomar represalias con el objetivo de que el alumno genere sus propios conocimientos.
Ejemplo aplicado en la andragogía
Su enfoque tiene fines motivacionales, cuando la persona ha querido aprender algo, pero no tuvo oportunidad de hacerlo cuando fue joven. Teniendo la motivación de un tercero puedo lograr su sueño, tal es el caso de desarrollar una nueva habilidad o concluir un nivel académico.
Principios de la andragogía
- Participación: un intercambio de experiencias mejora la asimilación del conocimiento.
- Horizontalidad: se presenta cuando el facilitador y estudiante tienen las mismas características, por ejemplo, la edad y, tienen diferencias cualitativas, por ejemplo, la manifestación observable de su conducta.
- Flexibilidad: es comprender a los adultos, escucharlos y proveerlos de aprendizajes basados en sus aptitudes y destrezas.
Existen diversas técnicas que pueden aplicarse para que las personas puedan aprender, la edad no debe ser un impedimento para continuar con el aprendizaje formal e informal.
Como seres racionales, nunca dejamos de aprender. Es por eso que en Kichihua trabajamos constantemente para informarte acerca de temas educativos que como docente, padre de familia y alumno pueden interesarte.