Probablemente has escuchado lo importante que es recibir e impartir una educación de calidad; de acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el año 2030 todas las personas deberían poder recibir una educación de calidad. Pero, ¿A qué nos referimos exactamente con calidad educativa?
De acuerdo al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INNE) que es el organismo encargado de orientar, describir y monitorear el estado de la calidad educativa en México; recibir una educación de calidad, representa adquirir las competencias y los conocimientos necesarios para asegurar el reconocimiento y el respeto permanente a todos los derechos humanos. En otras palabras:
Garantizar que los individuos sean capaces ejercer sus derechos y respetar los de los demás.
De acuerdo al experto en educación y creatividad, Sir Ken Robinson, la educación que reciben las personas debería ayudarles a alcanzar un bienestar profesional, social, económico, físico y comunitario. Es decir, recibir una formación académica en cualquier escuela debería contribuir a que aprendieras a disfrutar lo que haces para ganarte la vida. También a tener relaciones y finanzas saludables, a gozar de buena salud y a que contribuyas al bienestar del lugar en donde vives.

¿Qué nos impide tener una calidad educativa?
Como te podrás imaginar, hay muchas cosas que necesitamos mejorar para poder afirmar que en México todos reciben una educación de calidad.
En Fundación Kichihua hemos realizado varias entrevistas a docentes y emprendedores del sector educativo que nos han compartido los retos a los que se han enfrentado y cómo los han solucionado.
Nos dimos cuenta de que para mejorar la educación era importante no sólo tratar de responder a los efectos que un sistema educativo deficiente provoca, sino cambiar las condiciones que causan en primer lugar que el sistema educativo sea deficiente.
El equipo de Kichihua creó la siguiente lista de causas y efectos con el objetivo de identificar posibles acciones para impulsar la calidad de la educación.
CAUSAS | EFECTOS |
Comunicación deficiente entre Docentes y Padres de Familia Ausencia de condiciones óptimas para la cooperación entre docentes Resistencia y largos periodos de adopción de nuevas tecnologías en instituciones educativas Escasos programas de capacitación dirigidos a docentes Acceso Limitado a Internet Inversión escasa o nula para la implementación de nuevas iniciativas educativas Sistemas de evaluación y gestión ineficientes Disonancia entre los requerimientos del mercado laboral y la formación impartida en las escuelas | Alumnos y Docentes desmotivados Miedo a la interacción entre docentes y estudiantes Analfabetismo tecnológico por parte de los docentes Escasas habilidades para la producción de contenidos educativos en línea Pocas oportunidades de crecimiento y reconocimiento laboral para los docentes Recursos y herramientas tecnológicas insuficientes Inhibición de la creatividad en alumnos y docentes Desigualdad en oportunidades económicas y sociales para acceder a programas educativos de calidad |
¿Qué podemos hacer?
Podemos notar que los efectos negativos mencionados en la tabla anterior son causados por problemas sistémicos, tecnológicos o de capacitación docente. Esto pasa no solo en habilidades técnicas o de conocimiento sino también en habilidades blandas.
Es por ello que una de las mejores cosas que podemos hacer para mejorar la calidad educativa es fortalecer la comunidad docente. No solo con programas de capacitación, sino con la apertura de espacios que promuevan la colaboración entre ellos.
Es por ello que hemos organizado foros de discusión mensuales con el objetivo de que los docentes tengan un espacio en el cual compartir sus propias experiencias educativas y aprender de otros compañeros docentes para implementar distintas estrategias en sus comunidades educativas.
Todos podemos contribuir de una u otra forma a mejorar la relación de calidad y educación. Si estás leyendo esta página muy seguramente ya estás pensando en hacerlo.